lunes, 15 de abril de 2013

Dos explosiones en el maratón de Boston.




Fuentes: The Boston Globe. WCPO.com

Como consecuencia de dos grandes explosiones ocasionadas por sendas bombas, ha habido tres muertos y más de ciento cuarenta heridos [la información al respecto ha sido un poco caótica: de madrugada se hablaba de al menos 144 heridos, para luego bajar a 130] cerca de la línea de meta de la maratón de Boston. La primera explosión se produjo alrededor de las 14:50 horas, a la altura del número 671 de la calle Boylston, a la que siguió otra con 13 segundos de diferencia. Había numeroso público a ambos lados de la calle observando la carrera, lo que transformó el evento deportivo en un caos de sangre.

Cuando el humo de las explosiones se disipó, docenas de víctimas yacían en la calle, algunas inconscientes y otras gravemente heridas. Entre los fallecidos se encontraban Krystle Campbell, una mujer de 29 años, y Martin Richard, un niño de 8. El hospital infantil de Boston atendió al menos otros cuatro niños. Otros siete hospitales se encargan de atender a los demás heridos, diecisiete de los cuales se hayan en estado crítico.

Oficiales de policía armados comenzaron labores de vigilancia desde el tejado del hotel Lenox. Los corredores y espectadores fueron evacuados inmediatamente. Todos los medios de transporte suspendieron sus servicios y los edificios colindantes fueron clausurados. Se instaló un hospital de campaña en las inmediaciones. La policía inspeccionó la zona.

El presidente Obama declaró que quienquiera que fuera responsable de la colocación de los explosivos sería encontrado y llevado ante la justicia:

"Todavía no sabemos quién lo hizo ni por qué. No se deberían sacar conclusiones antes de conocer todos los hechos. Pero que nadie se equivoque, llegaremos al fondo de esto... Los individuos o grupos responsables sentirán todo el peso de la ley."

Según testigos presenciales "... Fue como un cañonazo. Una gran nube de humo y gente cayendo. Todo el mundo se quedó helado y luego comenzaron los gritos. Había sangre por todas partes. Se llevaban a las víctimas en camillas. Algunos habían perdido miembros y había personas cuyos huesos asomaban a través de la piel. La gente lloraba... Los corredores desgarraban sus camisetas para improvisar torniquetes."

La cobertura de telefonía móvil falló como consecuencia del enorme número de llamadas en búsqueda de auxilio e información que se produjeron a partir de ese momento entre los ciudadanos de Boston.

Las fuerzas de orden público irrumpieron en una vivienda de Revere en búsqueda de lo que se ha descrito como "una persona de interés", pero todavía no hay detenidos ni sospechosos. El FBI, la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas y Explosivos y la Policía Estatal están investigando el caso, mientras que la Guardia Nacional se ocupa de asegurar el área donde se produjeron las explosiones. Se espera un parte policial a las 9:30 de la mañana.

El Gobernador Patrick declaró que no estaba claro todavía como se verían afectados los negocios particulares situados en la zona acordonada, pero que en la mayoría de los casos los propietarios no tendrían acceso a ellos durante la mañana del martes. La calle Boylston permanece sellada entre la calle Berkeley y la avenida Massachusetts.

Según un oficial de inteligencia, se encontraron dos artefactos explosivos más, que fueron desactivados. Se está procediendo a la revisión de las mochilas, bolsos y equipajes abandonadas en el escenario de las explosiones, pero hasta el momento no se han encontrado más artefactos explosivos. Las dos bombas que detonaron serían artesanales, fabricadas con pólvora y rodamientos a modo de metralla. Al parecer estaban situadas en cubos de basura.

Políticos como Joseph Kennedy III, Elizabeth Warrey y Mitt Romney han expresado sus condolencias vía twitter.

Se ha producido un tercer suceso en la librería John F. Kennedy, alrededor de las tres de la tarde, al desatarse un incendio que podría ser accidental o haber sido provocado por un artefacto incendiario. Es demasiado pronto para saber si está relacionado con las otras dos explosiones, pero en principio parece que no es así.


Localizaciones de las explosiones

La calla Boylston, tras una de las explosiones

Atendiendo a los heridos

Ya no se puede hacer nada por los fallecidos, y sólo cabe atender lo mejor posible a los heridos. Nos queda rogar por las víctimas, consolar a las familias y encontrar a los culpables, esperando que haya sido un acto de terrorismo interno... Porque de ser externo, me temo que podría ser atribuido a un grupo sirio, norcoreano o iraní, y no queremos que sirva para comenzar una nueva guerra.

No más atentados de falsa bandera o guerras civiles cocinadas para justificar nuevas intervenciones militares, invasiones y masacres realizadas por el NWO. Para cambiar gobiernos a su antojo, apropiarse de las fuentes de materias primas y eliminar posibles enemigos del país de la tierra prometida. Los pretextos ya están muy vistos. El Maine, el Lusitania, Pearl Harbor, la fallida operación Northwoods, el caso del golfo de Tomkin, la creación y financiación de grupos terroristas, la guerra de Bosnia, el 11S -con los "ataques" al Pentágono y a las torres gemelas-, los sobrecitos del ántrax, las armas de destrucción masiva, Bin Laden, Al-Qaeda, las guerras de Afganistán e Iraq, las bombas de Oklahoma, los atentados del metro de Londres y del 11M, las "espontáneas" revoluciones islámicas del norte de África, la actual guerra civil de Siria...

¿Cuál será la próxima guerra y con qué pretexto?

Por cierto... ¿Es la primera vez que falla la cobertura de telefonía móvil en Boston? ¿Realmente falló? ¿O fue desconectada deliberadamente? Si fue así, puede haber varios motivos. El motivo menos preocupante que se me ocurre es que se intentara evitar que se detonaran más mochilas explosivas mediante llamadas telefónicas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿No se habrán dejado algún pasaporte tirado cerca de la explosión? Los que hicieron el atentado, me refiero...